Dependiendo de las necesidades o de los trabajos que se van a realizar, es que se necesitarán diferentes tipos de grúas. La mayoría de estas poderosas máquinas cuentan con cables y poleas que ayudan a levantar o arrastrar todo tipo de cosas o materiales. Son mayormente usadas para arrastrar objetos, o es como más las conocemos. Pero, sin duda tienen muchas funciones y aplicaciones. A continuación, te diremos más acerca de cada una de ellas.
Las grúas que no se mueven. En otras palabras, son un tipo de grúas que se mantienen estéticas, algunas son llamadas telescópicas, de torre o de carga. Son fáciles de mover y de usar, digamos que son el tipo convencional y las más usadas por su versatilidad. Se pueden realizar muchas maniobras con este tipo de grúas, o mover grandes cantidades de carga.
Las grúas con movimiento. También son conocida como grúas móviles, son de las más estandarizadas para su uso en el sector de la construcción. Cuentan con aditivos hidráulicas en acero, también cuentan con plumas telescópicas, rieles o ruedas para mejorar su rendimiento. En la construcción es muy útil porque permita levantar materiales.
Grúas en camiones. También son conocidas como grúas recolectoras o grúas montadas en camiones o carretillas elevadoras. Pueden arrastrar hasta 50 toneladas y son ideales para el arrastre de camiones. Tiene una amplia movilidad y alcance, además se pueden realizar múltiples tareas y maniobras. Este tipo de grúas pueden viajar por carretera, son fáciles de mover por todos lados, su servicio es de bajo costo, se utiliza para cargar y descargar material rodante de camiones motorizados, son flexibles y rápidas.
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